Juanherrera

Mi mamá me dio la vida y Preludio las ganas de vivirla (no es chiste).

Mi llegada a Preludio fue, al principio, conflictiva. Entré pensando que sería algún sistema educativo tradicional en el que me darían clases de refuerzo para aprenderme de memoria cosas que desecharía la semana después de presentar exámenes.

No tomó mucho para que pasara de ser el estudiante que no llegaba a clase y que, si llegaba, llegaba tarde, sin maleta ni los elementos mínimos para una clase, a llegar media hora antes, en bicicleta y siempre ser el último en irme.

Juanherrera

Preludio es de los pocos espacios que realmente cumplen con la afirmación de «ser un segundo hogar”.

Incluso hoy en día, aunque ya la vida laboral no me permite tanto como me gustaría, sigo yendo y participando en iniciativas como TEDxYouth Usaquén y TEDEd y estar allá me genera la misma alegría, paz y tranquilidad de siempre.

Preludio marca un antes y un ahora en mi vida, gracias a ellos pude descubrir quién soy y estaré infinitamente agradecido por eso.

Juan Francisco Herrera (Egresado)

Daniela

Ya llevo tres años en Preludio, y en este tiempo encontré un espacio que se ha vuelto
muy importante en mi vida. Acá pude conocer a muchas personas y vivir experiencias que, definitivamente, han marcado mi vida. 

Creo que Preludio es un espacio muy valioso porque, como estudiante, no sólo te ofrece el acompañamiento que necesitas sino que su equipo de profesores te apoya y te ayuda realmente a crecer como persona, y eso es algo verdaderamente valioso porque es algo que no es tan fácil de encontrar hoy en día.

Me parece que Preludio es un espacio que he disfrutado y que muchos más niños deberían conocer. En Preludio van a aprender esas habilidades que tanto necesitan y que les van ser tan útiles vida.

Daniela Forero (Estudiante)

Sara

Entré a Preludio en el 2019, apostándole a una educación diferente junto a mi hermano y dos estudiantes más. Éramos nuevos en todo esto y, en un principio, no estaba muy feliz de dejar la comodidad de mi colegio.

Menos mal mi padre creyó en Andrés y Ángela la primera vez que los escuchó porque ahora puedo decir que gracias a ellos he logrado y muy seguramente lograré todo lo que me proponga en la vida. Ése es el regalo que me dio Preludio: darme todas las herramientas para cambiar el mundo. Desde hace 4 años he hecho cosas que jóvenes de mi edad usualmente no hacen, pero no porque no podamos si no porque el sistema no está hecho para que soñemos en grande.

Sara

He grabado dos charlas TED, he montado un emprendimiento, he organizado el evento TEDxYouth más grande de Colombia. He aprendido por montones, he viajado, conocido y explorado todas mis pasiones, sobre todo he sido y sigo siendo muy feliz estudiante de Preludio, porque aunque ya no tenga clases todos los días sigo aprendiendo y sigo sintiéndome parte de la familia.

Sueño con que todos los jóvenes colombianos puedan acceder a este tipo de educación.

Sara Ñustes, (Egresada)

Ya llevo 3 años en Preludio y en este tiempo encontré un espacio que se ha vuelto muy importante en mi vida. Acá pude conocer a muchas personas y vivir experiencias que, definitivamente, han marcado mi vida. 

Creo que Preludio es un espacio muy valioso porque, como estudiante, no sólo te ofrece el acompañamiento que necesitas sino que su equipo de profesores te apoya y te ayuda realmente a crecer como persona, y eso es algo verdaderamente valioso porque es algo que no es tan fácil de encontrar hoy en día.

Me parece que Preludio es un espacio que he disfrutado y que muchos más niños deberían conocer. En Preludio van a aprender esas habilidades que tanto necesitan y que les van ser tan útiles vida.

Daniela Forero (Estudiante)

Mi mamá me dio la vida y Preludio las ganas de vivirla (no es chiste).

Mi llegada a Preludio fue, al principio, conflictiva. Entré pensando que me encontraría con algún sistema educativo tradicional en el que me darían clases de refuerzo para aprenderme de memoria cosas que desecharía la semana después de presentar exámenes.

No tomó mucho para que pasara de ser el estudiante que no llegaba a clase, y que, si llegaba, llegaba tarde, sin maleta ni los elementos mínimos para una clase a llegar media hora antes, en bicicleta y siempre ser el último en irme.

Preludio es de los pocos espacios que realmente cumplen con la afirmación de ser un “segundo hogar”.

Incluso hoy en día, aunque ya la vida laboral no me permite tanto como me gustaría, sigo yendo y participando en iniciativas como TEDxYouth Usaquén y TEDEd y me genera la misma alegría, paz y tranquilidad que antes.

Preludio marca un antes y un ahora en mi vida, gracias a ellos pude descubrir quién soy y estaré infinitamente agradecido por eso.

Juan Francisco Herrera (Egresado)

Sueño con que todos los jóvenes colombianos puedan acceder a este tipo de educación.
Educación
más cercana
y personalizada

Es gratificante ver a tu hijo disfrutar investigar, leer, jugar, construir sus propios objetivos y pensar qué estrategias lo van a  llevar a conseguirlos. 

Para nosotros Preludio es pensamiento, crecimiento personal, creatividad  y diversión a través de desafíos diarios, de compartir creando  lazos sanos de amistad  y  apoyo permitiendo que nuestro hijo tenga el valor de ser él mismo. 

Este proceso de enriquecimiento ha permitido que sea un ser humano empático, tolerante y auténtico.

Sandra Rojas (Mamá)

De las decisiones más acertadas e importantes que tomamos en la educación de Sofi, ha sido la de vincularla con Preludio en metodología microschool, porque logró confirmar  su gran interés por las matemáticas a través de los retos y solución de problemas, así como también identificar su liderazgo gracias a la participación en la  organización de eventos TED.

Preludio ha sido un lugar que le ha permitido expresarse, sentirse segura y sobre todo ver y analizar las situaciones de vida de otra forma para poderlas enfrentar, en virtud a su nivel de exigencia que es alto, pero sin sentir la presión que existe en los colegios con metodologías tradicionales.

Todo esto ha permitido que hoy sea una gran estudiante universitaria que ya cursa 5 semestre de matemáticas, exprese su talento perteneciendo al grupo de danzas de la universidad y sea una líder natural promoviendo que toda la familia realice deporte de forma estructurada para lograr calidad de vida y objetivos individuales.

Emilse Díaz (Mamá)

En PreLudio encontramos el apoyo requerido para continuar con el proceso académico de José David. No es fácil en la mitad del camino encontrar un sitio donde los chicos sean comprendidos, un lugar donde afloren las mejores cualidades y les den herramientas para manejar sus emociones, pero sobretodo un lugar donde sean totalmente felices. Claramente al día de hoy puedo decir que mi hijo fue feliz en PreLudio.

Diana Cruz (mamá)

Cuando llegué a preludio estaba un poco perdida, no identificaba cuáles eran mis fortalezas y debilidades, no tenía claro que me apasionaba y, lo más crítico, tenía problemas para socializar con personas de mi edad. Con el acompañamiento de los profesores he avanzado en estos procesos y ahora me siento mucho más madura, tranquila y lo más importante: feliz.

Camila Peña, (estudiante)

Entré a Preludio en el 2019, apostándole a una educación diferente junto a mi hermano y dos estudiantes más. Éramos nuevos en todo esto y en un principio no estaba muy feliz de dejar la comodidad de mi colegio.

Menos mal mi padre creyó en Andrés y Ángela la primera vez que los escuchó porque ahora puedo decir que gracias a ellos he logrado y muy seguramente lograré todo lo que me proponga en la vida. Ése es el regalo que me dio Preludio: darme todas las herramientas para cambiar el mundo. Desde hace 4 años he hecho cosas que jóvenes de mi edad usualmente no hacen, pero no porque no podamos si no porque el sistema no está hecho para que soñemos en grande.

He grabado dos charlas TED, he montado un emprendimiento, he organizado el evento TEDxYouth más grande de Colombia. He aprendido por montones, he viajado, conocido y explorado todas mis pasiones, sobre todo he sido y sigo siendo muy feliz estudiante de Preludio, porque aunque ya no tenga clases todos los días sigo aprendiendo y sigo sintiéndome parte de la familia.

Sueño con que todos los jóvenes colombianos puedan acceder a este tipo de educación.

– Sara Ñustes, (Egresada)